Teoría del arte/1.2 Clasificación del concepto ‘arte’

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Unidad 1. El concepto del arte

Bloque 1.2 Clasificación del concepto 'arte'

Al término de la unidad el estudiante será capaz de identificar los principales elementos que hacen del arte uno de los productos culturales de mayor complejidad.

Arte[editar]

Como se ha señalado en el bloque 1.1, el arte para los griegos era diferente a la actualidad, y que el concepto «techné» (τέχνη) se aplicaba a todo tipo de producciones realizadas con destreza y siguiendo reglas establecidas. Un maestro de un arte era igualmente valorado, fuera un tejedor, un zapatero o un pintor.[1]

Para poder practicar las artes comprendiéndolas así, de un modo amplio como lo hicieron los griegos, se necesitaba poseer no sólo una capacidad física, sino también, y sobre todo, una habilidad intelectual, esto es, entender, la artesanía en cuestión. Por tanto, aunque el arte comprendía también las artesanías del carpintero y del tejedor, los griegos lo clasificaron como una actividad intelectual.[1]

El arte, según los griegos, era una actividad que se entendía opuesta a una serie de otras acciones o actividades:

se oponía a la naturaleza, pues era obra del hombre; a la percepción, pues era una actividad práctica; a la práctica, pues era una actividad productiva; a lo fortuito, pues resultaba de un propósito y de una destreza; y a la simple experiencia, pues se componía de una serie de reglas generales.[2]

Como también se señala en el bloque 1.1, para los griegos, existían dos tipos de artes:[3]

  1. Artes liberales
  2. Artes subordinadas o serviles

Algunas clasificaciones, como la de Pamphilos, incluían a la pintura entre las artes liberales.[3]

Otras clasificaciones de arte[4]
Autor Clasificación
Galeno Según ejecutaran sus tareas por sí mismas o dependieran de otros factores
Aristóteles Si eran necesarias o recreativas
Platón Si se basaba en la experiencia o en el cálculo.
Aristoxeno Teóricas, prácticas y poéticas

En general, para los griegos, las artes se agrupaban a la par que las actividades que más tarde sería consideradas artesanías. Eran, más bien, la esencia de casi todas las profesiones.[5]

Poesía[editar]

Para los griegos, la labor de un poeta no era «arte», pues no requería de reglas. Consideraban, sin embargo, una relación entre poesía y profecía, pues estaba inspirado por los dioses. La poesía, por tanto, tenía un factor espiritual que la elevaba por sobre otras actividades.[6]

La poesía, a su vez, se relacionaba con el conocimiento, y uno de los más elevados por su relación con lo espiritual y lo divino:

Se acercaba por lo tanto a la filosofía: especialmente en un sistema como el platónico, poeta y filósofo era algo parecido. Además, sabiendo que la poesía trata de la expresión general de los fenómenos, Aristóteles escribía que es «más filosófica» que a historia, que simplemente determina los hechos individuales.

La poesía, a diferencia de la pintura, no produce objetos, por eso se encontraban en divisiones conceptuales diferentes. Mientras la pintura estaba en la división de la producción, la poesía estaba en la cognición.[6]

Por otro lado, debido a que los griegos admiraban el valor moral y pedagógico de las ideas, consideraban a la poesía en un terreno de sabiduría, pues utilizaban esta habilidad para diseminar y compartir ideas de instrucción entre las personas.[6]

Características particulares de la poesía según los griegos:[7]

  • Capacidad de vaticinio e inspiración divina
  • Significado metafísico y espiritual
  • Rasgos morales e instructivos

Sin embargo, los griegos también estudiaban a la poesía por su forma; es decir, por la métrica del verso. Cualquier obra en verso era considerada poesía. Sin embargo, Aristóteles decía: “El poeta es mucho más poeta por el contenido de su obra que por su forma métrica”.[7]

Aristóteles hizo también otras diferenciaciones. No consideraba poetas a los que versificaban un tratado de filosofía natural o de medicina. Decía que, aunque Heródoto esté versificado, eso no lo hacía un poeta. En este sentido, Aristóteles creó una separación de la versificación como arte del lenguaje y la inspiración poética, y se fue trasladando a otros ámbitos de la creatividad humana.[8]

También había una estrecha relación entre la poesía y la música, pues se practicaban de manera conjunta. Ambas eran vistas como actividades de la acústica. Por otro lado, también se le vinculaba al baile, por su relación con el éxtasis y la inspiración.[9]

El culto hacia los poetas en la Grecia clásica deja ver la estima que se tenía hacia esta práctica. Los textos de Plutarco y Luciano eran muy apreciados. Pero el poeta más laureado en Grecia era Homero, a quien se le rendía culto a través de los rapsodas. Durante algún tiempo también se le consideró un profeta y teólogo.[9]

Hermes de Atalante, de Lisipo, en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas

Belleza[editar]

El concepto bello en Grecia tenía diferencias con la concepción contemporánea, pues abarcaba muchas áreas de la actividad humana.[10]

Significados de belleza en la Grecia clásica:

  1. Digno de reconocimiento o mérito. Esto, relacionado con bondad, y lo que Platón decía que era la «belleza moral» Aristóteles decía quera “aquello que es bueno y por tanto agradable”.[11]
  2. Simetría. La idea de «simetría» en los griegos se refería sobre todo a lo que se conocía, no a lo observado; es decir, al intelecto más que a los sentidos. En las obras de los hombres lo que se apreciaba sobre todo era la "esencia divina de las cosas". En la época clásica se consideró el concepto de «euritmia», relacionado con el orden sensual, acústico y visual; es decir, tenía más relación con el actual concepto de estética.[12]

Los artistas griegos se dividían en aquellos que realizaban sus piezas tomando en cuenta la simetría, y aquellos que se ceñían a la euritmia. Las artes visuales, con el tiempo, siguieron el camino de la euritmia y una intención ilusionista. Escultores como Lisipo, fueron los primeros en tratar de modelar esculturas de una manera sensual, trascendiendo el concepto antiguo de simetría.[13]

Creatividad[editar]

La idea de los griegos con la creatividad era distinta a la de las definiciones modernas, pues consideraban que los artistas empleaban la teoría mimética (de imitación). En este sentido, el artista no creaba nada, sino que imitaba la realidad natural. Por otro lado, había un culto a los cánones, las reglas y los patrones.[14]

Los griegos no valoraban la originalidad en la techné, sino una perfección formal, la cual se repetía de forma continua, para tener siempre el mismo resultado. "Incluso Aristóteles había afirmado que un artista debería borrar las huellas personales que existieran en su obra de arte."[14]

Esto es así, porque las obras de arte o artesanales, eran rutinarias, y en ellas sólo había tres factores: trabajo, forma y materia. El trabajo era el que cualquier trabajador realizaba, la materia era un regalo de la naturaleza, y la forma era algo que trascendía y era eterna.[14]

Mímesis[editar]

Referencias[editar]

Fuentes de consulta[editar]