Curso de Piano

De Wikiversidad

Muy buenas, pequeño saltamontes.

¿Te gustaría aprender a tocar el piano? ¿Te gustaría poder rivalizar con Chopin y ser la envidia de Rachmaninoff?

Lo segundo es complicadillo, más que nada porque ambos están muertos, pero podemos empezar aprendiendo a tocar el piano. Y para empezar, ¡qué menos que saber qué es un piano!

El Piano[editar]

El Piano es el título de una bonita película, pero también es un instrumento, el instrumento que registra la mayor cantidad de notas. Para que os hagáis una idea, con la flauta dulce podéis tocar desde el mi agudo hasta el do grave, más o menos una octava y media. El piano permite tocar siete octavas (grupos de ocho notas) completas y un par de notas más, con uno estándar (88 notas). Las notas blancas son las notas sin alteraciones, y las negras son las que tienen bemoles o sostenidos (En este curso siempre hablaré de una armadura simple, con pocas excepciones). Quien quiera leer un poco más acerca de las notas musicales, revise esta página web porque tiene una explicación muy fácil de entender.

Bien, ahora que hemos considerado la grandeza de este instrumento, pasemos a algo más práctico: sus teclas. No sé el piano que tendréis, si es eléctrico del chino, si es de cola de Alemania, ni me lo digáis. Las teclas se irán repitiendo de este modo: tres teclas blancas intercalando dos negras, cuatro teclas blancas intercalando tres negras, y vuelta a empezar. Cada vez que se repita, se repitirán las notas, aunque más agudos o más graves (para la derecha o para la izquierda).

Que las teclas estén contrapesadas significa que hace falta fuerza para "golpearlas", porque si no lo están, bastará casi deslizar el dedo sobre ella, como suele ocurrir en los teclados eléctricos, para que suene. Normalmente, las contrapesadas suelen tener más sensibilidad al tacto (normalmente). De hecho, y por curiosidad, la palabra piano viene de esta propiedad tan importante: Pianoforte, que literalmente significa, suavefuerte, toda una contradicción.

El piano suele incorporar pedales. Hay tres pedales:

-- Uno sirve para mantener el sonido de las notas, mantenerlos en el tiempo. No digo sostener, vaya a que se confunda con el "sostenido", que es diferente. Éste es el pedal derecho. Si solo tienes un pedal, será este, pues es el más importante. Si tienes un "keyboard" (un teclado eléctrico), el efecto que correspondería, dando un salto a la música electrónica, sería el "sustain".

-- El del medio es el pedal menos usado. Podemos encontrar de dos tipos, ya que los pianos de pared, por lo general, lo cambian por una sordina (que amortigua el sonido, y consiste en una tela que se mantiene contra las cuerdas, evitando que vibren con normalidad)). Sin embargo, si vamos a un piano de cola, encontraremos que su efecto es mantener la nota pulsada en el momento de bajar el pedal (y no las restantes, lo que la diferencia del pedal de la derecha)

-- El pedal de la izquierda, frecuentemente llamado "una corda", hace que el sonido sea más dulce. Técnicamente hablando, lo que hace es desplazar los macillos para que sólo percutan una de las tres cuerdas que posee cada nota.

Bastante hemos discurrido ya acerca del piano, así que pasemos a la acción. Os describiré el método que vamos a seguir.

El Método[editar]

Fase 1

Lo primero, practicar sobre el piano con una mano. Hay que habituarse en el sonido del piano. Durante todo el método, el objetivo que el pianista debe cumplir es fusionarse en cuerpo y alma con el piano. Sí, eso mismo. Conseguir tal combinación entre sentimientos, mente, dedos y piano (cuerpo y alma con el piano) logrará que la música salga sola de nosotros, o del propio piano, nunca lo sabremos a ciencia cierta. Practicar con una sola mano considero que es una buena fase de iniciación para coger ritmo con el golpeteo de teclas. Ir probando con blancas, negras, sacándose canciones facilillas, la voz del cantante (no pasemos aún a cosas superiores a esto, por favor. Iremos rápido, sí, pero no tanto). Aquí lo más importante es NO USAR LA MANO IZQUIERDA. Si la usas para apoyarte, has perdido el tiempo y te mal acostumbrarás.

Fase 2

Una vez hallamos cogido soltura con una mano, para que podamos fardar delante de nuestras amistades de lo rápido que se mueve mi manita, comenzaremos a ejercitar la izquierda. Utilizaremos para ello canciones en las que daremos el pulso con la izquierda. Pom... pom... pom... nada que ver con lo que hará la derecha, que será la misma melodía.

Fase 3

Cuando le hallamos cogido el truco a esto, empezaré a hablaros de los acordes, y notaréis que aprenderéis armonía vosotros solos. Arpeggiaremos, improvisaremos, haréis barridos de piano, (subir y bajar por el teclado del piano)... vamos, nos luciremos.

Fase 4

Una vez terminada esta fasecilla, empezaremos con ritmos más complejos con la mano izquierda, y empezaré a detallaros ciertas técnicas que se me vayan ocurriendo para la mano derecha, para daros más herramientas, al fin y al cabo.

Fase 5 o Zénit

Con esto ya acabado, podéis consideraros pianistas, pero yo os veo mayor aspiración, así que os propondré EL RETO FINAL.

Fase 1[editar]

Bien, si estáis leyendo esto es que habéis sucumbido a mi trampa y vais a aprender a tocar el piano. Pues nada, ¡¡a tocar!!

No voy a hablaros mucho de disposición de los dedos, por una razón:

La disposición sirve para que el pianista se sienta cómodo y llegue a las notas más fácilmente, o a notas que el dedo las percibe en la lejanía... Sin embargo, somos seres vagos por naturaleza: no dudéis ni por un instante que vuestros dedos buscarán la postura más cómoda. Y si no la sentís, buscadla vosotros, que no es tan difícil. Además, nadie está de acuerdo con el concepto de "la disposición apropiada".

El objetivo de esta fase es conseguir ligereza con los dedos, adaptarnos a cada tecla del piano y por último conseguir velocidad en los movimientos de los dedos. La ligereza en los movimientos de manos la conseguiremos en fases posteriores.

Empezaremos a tocar la canción Do-Re-Mi (Dooo extraaacto dé va-rón...) ésa. Si la letra no os suena, da igual, es la música la que os debe de sonar. Cuando poséis la vista sobre el piano, debéis a acostumbraros a que se pose sobre la pareja solitaria de dos teclas negras que hay por el centro del teclado, es un consejo psicológico. Las tres teclas blancas que la rodean son, de izquierda a derecha, Do-Re-Mi. Ese Do es la nota de referencia por excelencia en el piano (Do central se le llama), es por eso ese consejillo psicológico.

Las notas de Do-Re-Mi son las siguientes:

  • Do-, re, mi-, do, mi-, do-, mi-. (Procuremos jugar con los tres dedos centrales de la mano)
  • Re-, mi, fa, fa, mi re, fa-. (Cambiemos la posición de dichos tres dedos en el teclado)
  • Mi-, fa, sol,- mi, sol-, mi-, sol-.
  • Fa-, sol, la, la, sol, fa, la-. (Ánimo, vamos a la segunda parte)
  • Sol-, Do, re, mi, fa, sol, la-. (Juguemos con todos los dedos de la mano)
  • La-, Re, mi, fa#, sol, la, si-. (Cuidado, negra. El Fa blanco se nos vuelve negro)
  • Si-, Mi, fa#, sol#, la, si, do-. (Quizá el movimiento más difícl de la canción, pero ahora llega lo bonito)
  • Si, la#, la-, fa-, si-, sol-, DO. (y vuelta a empezar, bis)

Sí, tal vez sea dificililla, pero la constancia es la forma de aprender. Y creo que es factible para nuestro nivel, así que considero que un éxito en esta batalla predice una inminente victoria en el curso (inminente... y eminente, todo hay que decirlo).

Una vez aprendida, me gustaría que nos fijáramos en un par de cosillas de la canción. Fijémonos en la segunda parte. Se da un golpe en sol, y luego se hace como una escala. Luego un golpe en La, y otra escala. Y también se da un golpe en la nota final de cada versillo de esa segunda parte.

Pues bien, cuando empieza a bajar por la escala, empieza desde el Do. Y resulta que es la escala de do mayor, sin alteraciones (notas negras). Luego es la escala de Re mayor (empieza en re), y luego la escala de Mi mayor. Podemos decir que todo es mayor porque es una canción alegre (Mayor se identifica con alegre), pero este razonamiento, aunque hay que tenerlo muy en cuenta, no se puede afirmar a rotundas, porque pueden darse con facilidad muchos casos con menores y canciones alegres (Menor se identifica con triste).

Sabiéndonos las escalas, podemos saltarnos una gran trabajera memorística, y aprendernos largas partes con solo identificar qué es. Saberse las escalas, además, nos permite improvisar. En mi opinión, las dos únicas cosas que uno DEBE saber para tocar el piano de forma excepcional y hacerlo sin mucha teoría necesaria, son las escalas y los acordes, e incluso con ellos pasa lo mismo: si los comprendes, no tienes por qué aprenderlos de memoria, sólo identificarlos. La música es como la vida: amarga en un principio, pero conforme la comprendemos, asimilamos y aceptamos, se nos va haciendo más gustosa y aprovechable, hasta hacérnosla muy dulce.

Para aprendernos las escalas mayores y menores, esta página web nos viene de perlas: Escalas mayores y menores

Aquí vienen en notación inglesa. También conviene que aprendamos la inglesa, no por nada, sino porque vivimos en un mundo inglés: dominado por estadounidenses y comunicado por anglófonos. Es un sistema un poco más lógico que el tradicional, os daréis cuenta:

  • Do es C.
  • Re es D.
  • Mi es E.
  • Fa es F.
  • Sol es G.
  • La es A.
  • Si es B.

Creedme, merece la pena. La mayoría de las partituras que os encontréis estarán en notación inglesa (los acordes) y todo cuanto hablen en los foros o en páginas de Internet, incluso españolas, utilizarán la notación inglesa. Conviene manejar las dos.

Kit kat de teoría conveniente aparte (pido disculpas, no se volverá a repetir) continuamos nuestro Curso de Piano.

"Fascination"

Otra canción que podríamos tocar a nuestro nivel, más complicada que la anterior (obviamente vamos de menos a más), es Fascination. Por si no sabéis cuál es, aquí tenéis un link en YouTube con un hombre que es realmente bueno en sus improvisaciones: Fascination Piano

Siempre está bien observar a los grandes, así que buscad por YouTube a grandes pianistas y observad bien lo que hacen, a ver si se nos pega algo.

Fascination comienza con Si, la nota a la de Do. Un golpe seco en Si, y continúa en Do, Mi, Sol, Do agudo. Para que ya os vaya sonando, esto es el acorde de Do mayor: Do, mi, sol.

Pincha para oír Fascination de Wikimedia Commons:

  • Si- Do, Mi, Sol, Do- Si- Do, Si- (Sería lo hablado, y luego vuelve a hacer algo parecido:)
  • Si- Do, Mi, Sol, Do, Si, do, Si, La- Fa- (Conviene hacer estos movimientos colocando los dedos de forma que en cualquier momento golpeemos a do, mi o sol, con los dedos encima suya casi que apoyados en esas teclas. Esto permite una predisposición psicológica a acercarnos a estas notas y una mayor facilidad a la hora de tocar notas en un rango más amplio. Esto, que parece una tontería, lo llegaréis a hacer automáticamente sin que os déis cuenta)
  • Re, Fa, La, re- fa, mi, re, do#- (Mayúsculas graves, minúsculas agudas, por si no os habéis dado cuenta. Aquí tenéis que mover el brazo un poco para mover la mano a la parte aguda)
  • Re, Fa, La, do- Si- do- do#-
  • Re, Fa, La, do- Si- La- Sol- Mi- Re- Do- (Y aquí termina la primera parte de la canción).

Ahora repetimos los dos primeros versos y continuamos de esta manera:

  • Re, Fa, La, fa, mi, re, do, La, Mi- Re- (Aquí debemos ampliar mucho la mano para poder alcanzar ese fa agudo).
  • Re, Fa, La, re- mi- fa- (y terminó).

Sí, he simplificado la canción bastante, pero creo que era necesario. Volveremos sobre esta canción más adelante y la tocaremos casi como sale en el vídeo.

Como canciones extra, podéis aprenderos cualquiera de oído con una sola mano. Es bastante sencillo, probad, iréis cogiéndole el truco. Sin embargo, todas estas canciones suenan muy pobres tocadas con una sola mano. Es el momento de pasar a la Fase 2 y tocar con ambas manos, y sentirnos orgullosos de nuestro piano... y de nuestras manos.

La canción con la que nos valdremos para ascender de nivel será Summertime, que incluirá un pequeño solo que parecerá improvisado (pero no lo será, aún estamos verdes para eso. Lo dejaremos para la Fase 3). La mano difícil aquí será la derecha, y será la que nos aprendamos primero. Sin embargo, lo que más nos va a costar será coordinar nuestras dos manos, marcando el pulso con la izquierda y tocando la melodía con la derecha.

Con la mano izquierda, como he dicho, marcaremos el pulso, con acordes. Los acordes son, básicamente, más de una nota tocada a la vez, y su nombre es la posición de las notas con respecto a la que le da nombre, que se llama fundamental. Así, el Mi6 (mi sexta) es el mi y seis notas hacia la derecha, otra nota más. Aquí tenéis una página con todos los acordes (quizá no todos, porque son infinitos: depende de lo que queramos hacer en música): Diccionario de acordes de piano

Además, he aquí un curso que parte de cero, pero es bastante rápido y sencillo, de armonía. Considero que la armonía es más que pura teoría (la teoría a ninguno nos gusta). Es herramientas para poder tocar mejor el piano, para aprender muchísimo más rápidamente y, una vez aprendido, interpretar con mucho estilo y virtuosismo. Una ojeada nunca vendrá mal, y tener en cuenta los principios en los que se basa la música y conocerla no nos hará mal, sino un bien que no puedes llegar a notar hasta que lo pones en práctica, tocando el piano. Pero ya llegaremos a la improvisación. Primero aprendamos a usar la mano izquierda un poco.

Para tocar Summertime nos valdremos de la partitura, ya que estamos avanzando mucho más y se nos acelerarán las cosas.

Fase 2[editar]

En esta fase debemos conseguir:

  • Adquirir mucha velocidad con los dedos de la mano derecha.
  • Potenciar nuestro sentido del ritmo con la mano izquierda.
  • Ser capaz de aprendernos la mayoría de las canciones pop/rock usando acompañamientos simples, todo de oído.
  • Practicar y aprender melodías con acompañamiento (mano derecha: melodía con algunas notas dobles y triples. Mano izquierda: acompañamiento con golpes y arpegios sencillos).

Con este manual de técnicas de aprendizaje, memorización y técnicas para tocar el piano tan bien traducido, y por otro lado tan bien confeccionado por un compositor y pianista actual, podréis aprender mucho (tanto el cuánto os queda por aprender, como el cómo debéis hacer para aprenderlo). Este manual os servirá de mucho para conseguir nuestros objetivos y llegar con facilidad a la fase 3, y luego a la 4. En la 4, pocos manuales os serán de utilidad en mi humilde opinión... Pero por ahora, ¡a aprender se ha dicho, pequeño saltamontes!

Fase 3[editar]

Lo primero que deberíamos hacer es aprender a arpegiar. Para ello, toca una sucesión de acordes, sea I-II-IV-V#-VI#-V7-IV-IV7-I#-V-I, todos ellos acordes mayores, que es de mis favoritas, suena bastante bien, y es larga. Tócala en Do para empezar. Lo suyo es tocar do-mi-sol-do-sol-mi-do y así sucesivamente con el resto de acordes. Luego puedes variar la duración de cada acorde cambiando el número de notas por arpeggio, o moviendo los dedos más rápido, ve variando el ritmo. Cuando hayas dominado los arpegios estáticos, a por los dinámicos, con desplazamiento a lo largo del teclado. Sube dos octavas y vuelve, y domínalo para la sucesión entera. Una vez hecho esto, cambia los ritmos, las velocidades y los acordes, no te quedes en la sucesión propuesta (I-II-IV...), innova. Para conseguirlo, debes hacer un buen uso de cada dedo, de manera que te sea muy cómodo y que tu mano pueda abarcar grandes distancias. ¡Para el tema de la distancia, juega mucho con el meñique y el pulgar!

Dominados arpegios estáticos y dinámicos, arpegia con una melodía en la mano derecha. Toca la canción Do-Re-Mi con acompañamiento de arpegio, y vele aumentando la dificultad conforme vayas progresando. Haz lo mismo con Summertime... y con Lady Madonna...

Con esto dominado, te veo capaz para la asunción del género superior de música al piano, la música clásica. Y empecemos con algo fuerte. Bonito, y fuerte. Las danzas eslavas nº2 opus 72 de Antonin Dvorak. Este vídeo es a cuatro manos, como fue su versión original. Sin embargo, en IMSLP hay un arreglo para piano a dos manos muy fiel, de forma que la diferencia apenas se nota. Con nuestro nivel es posible tocarlo, y tocarlo nos impulsará a la fase 4.

Fase 4[editar]

En esta fase os enseñaré tecniquillas que podréis utilizar para improvisar, para tocar mejor el piano, para conseguir sonidos nuevos, etc... Los estudios son obras pequeñas para piano que enseñan una técnica. Pues bien, yo os enseñaré la técnica sin la obra. No es que sea mejor ni peor, al contrario, tendréis vosotros mismos, con vuestro interés, que practicar inventándoos ejercicios y dificultades para adquirir cada técnica que yo os vaya enseñando. Suena un trabajo duro, pero os auguro menos de tres días para cada técnica en cuanto a su aprendizaje... ¡y un mes para su domino como mínimo!

Técnica avanzada 1: Barrido con una mano[editar]

Obsérvese el estudio número 1 de nuestro amigo y vecino Chopin

Fijáos en el segundo 3 cómo se va moviendo la mano reshulona para allá y para acá. Eso es justo lo que yo espero de vosotros. La técnica es bien sencilla, ¡si bien difícil! Lo mejor es ir practicando con algo así como la intro de las improvisaciones de este usuario de YouTube. Esto lo consigue moviendo la mano derecha de la siguiente forma: Re#, La#, Re# ', Re# ' La# ' Re# '', Re# '', La# '', Re# ''',...

Lo que hace es tocar las tres notas mientras va moviendo la muñeca hacia la derecha, volverla a posicionar sobre la siguiente octava más aguda y volver a tocar las tres notas, y again, again, again... Si ya no se hace esto con tres notas, sino con un acorde, o bien con una sucesión de notas que responde a una armonía más... elaborada... no sólo queda guay del paraguay sino que, si lo conseguís, ¡habréis dominado la técnica! Y recordad que no es sólo en dirección al agudo, sino para abajo también, ¡¡¡la mano debe volver!!! Combinad esta técnica con algo con la mano izquierda, que no se quede muerta, y sentíos poderosos al piano.

Técnica avanzada 2: Deslizamiento dedil[editar]

Esta técnica es bastante cómoda para tocar, y queda espeluznantemente bien si dominas su intensidad y duración, ¡aunque sean sólo matices debido a su corta duración! Se trata de golpear la tecla negra con un dedo, sea cual sea, pero por el lateral, de forma que se hunda primero la negra e instantáneamente golpee el dedo a la blanca. Hacerlo hacia ambos sentidos a partir de la negra suele dar grandes resultados en las improvisaciones. La pega que pueden ponerle a esta técnica los pianistas más tradicionalistas es que su resultado es incierto, pero como ocurre con el barrido con una sola mano, si la dominas, la dominas, y tienes bajo control todo efecto que pudiere provocar: eres el pianista, quien decide qué debe oir el público y qué debe sentir.

Técnica avanzada 3: Teletransporte[editar]

No es en sí una técnica, sino una capacidad adquirible a tener muy en cuenta. Simplemente se trata de estar tocando en la parte más grave del teclado y moverse con la rapidez de una semicorchea a la parte más alta del teclado. Existen en muchas obras acordes que se tocan de esta manera, aunque no con distancias tan exageradas.

Para hacer frente a estos acordes, lo suyo es aprender el movimiento que se debe realizar a cámara lenta y exagerando la altura con un salto, impulsándote en el primer acorde, volando, y aterrizando en el segundo. Cuanto más aumentes la velocidad, menor altura alcanzarás. La altura es necesaria para dar precisión al golpe. A gran velocidad, la altura es mínima, llevando el desplazamiento de uno parabólico a uno rectilíneo. La técnica del teletransporte implica la inexistencia de salto y el desplazamiento de la mano de forma totalmente lateral.

La principal dificultad en el teletransporte radica en tocar las notas incorrectas en el segundo acorde, sea el grave o el agudo. Por ello, es necesario observar las notas negras cercanas al acorde, de manera que si en el acorde debes tocar un La con el dedo anular, dicho dedo deberá teletransportarse hasta chocar con el La#, y caer, posicionando a su vez al resto de la mano.

Técnica avanzada 4: Independencia rítmica[editar]

Conseguirlo es un gran paso para dominar la técnica avanzada 5. Esta técnica es extraña en tanto en cuanto en música siempre ha predominado "la proporción", y con ello me refiero a que si la corchea vale medio tiempo, la negra vale uno exactamente y la blanca dos. ¿Os imagináis que las figuras en lugar de establecer el tempo, lo sugirieran simplemente? Existe, y se da mucho en el Romanticismo, pues la libertad es uno de los valores que promulga. Sugiero que contempléis música de Rachmaninoff, tal como el Preludio número 5 en sol menor (fijaos en la sección intermedia, la lírica y bonita. Fijaos en como corre el acompañamiento y cómo va cambiando de tempo). También se puede observar en los tempo rubato de Chopin, esos que tanto le gustaba.

La independencia rítmica se consigue sintiendo muy bien la música, sintiendo qué es lo que se pretende con la música y la función de cada nota que vas a tocar. Entonces tocarás el acompañamiento ajustando los conjuntos de notas a la otra mano, ajustando tanto su volumen como su velocidad, todo para que suene maravillosamente bien. En cuanto a la relación velocidad-volumen, resulta un ejemplo muy bueno a seguir el criterio de Rachmaninoff: El acompañamiento, que bien difícil y rápido que puede resultar, queda en segundo plano, casi inaudible pero otorgando un sentimiento a la melodía que, de otra manera, no se podría conseguir.

Una vez que el pianista tenga ese sentido de la melodía y de su acompañamiento en su interior, lo único que tiene que hacer es tocar. El 90% del trabajo es plena predisposición. El 10%, acoplar tus dedos y movimientos, intentarlo muchas veces... lo que cualquier pianista haría a la hora de aprender a tocar una sección.

Técnica avanzada 5: Independencia absoluta[editar]

Es bien conocida entre los pianistas la Aethernal Dyscussion por la respuesta a tan intrigante misterio: ¿Es posible una independencia entre los dedos a voluntad? En mi opinión, el simple hecho de poder tocar una música moviendo de forma diferente cada dedo, el simple hecho de poderse tocar un acorde de do menor sostenido, hace posible la independencia absoluta. ¡Ojo! tocar un do menos sostenido no implica tener independencia absoluta, en absoluto. Pero lo posibilita absolutamente.

Absuélvanme por esta introducción, pero la vi necesaria para justificar el procedimiento a seguir. Pequeño saltamontes, lo primero que debes hacer es, si no has conseguido ya cierta ligereza al improvisar, es conseguirla. Lo suyo es conseguir la independencia entre cada dedo de una sola mano. Para ello, tóquense ciclos de quintas con distintas notas, suenen bien o mal, que transmitan sentimientos diferentes. Eso en cuanto a la independencia estática.

En cuanto a la dinámica, tóquese una melodía con la derecha, tratando de acompañarse con otro dedo a contrapunto, y si vais cogiéndole el tranquillo, tres melodías con una sola mano, aunque una sea solamente como línea de bajo (poco bajo se puede hacer una mano a sí misma, pero llámese así, bajo). En cuanto consigáis la independencia dinámica y la estática, probad a hacer barridos con una mano con diferentes combinaciones de notas. Esto combinará las dos independencias.

Tras esto, es hora de independizar ambas manos, y con ellas todas tus articulaciones pianísticas, si es que no usas los pies para tocar...

Haz el ejercicio anterior de barridos con una mano siguiendo un ciclo de quintas cambiando la configuración de las notas y mueve la mano izquierda como si improvisaras una línea de bajo, da igual si suena bien o no (procura que sí suene, pero ello requiere la independencia absoluta y la fusión del alma con el piano: es complicaete). Invierte el mismo ejercicio para la otra mano. Si lo consigues, habrás conseguido la independencia absoluta.

El hecho de que puedas tocar cuanto desees con ambas manos hace de ti un pianista con independencia absoluta, pero no un pianista absoluto: debes fusionar tu alma con el piano, y para ello se deben hacer dos cosas:

  • Cultivar la filosofía del sentimiento en tu ética personal, buscando sentimientos diferentes, eliminando los nombres que se les dan, pues dos sentimientos no son iguales aunque "traten de lo mismo". Una envidia no es igual a otra, por ejemplo.
  • Asociar cada sentimiento a una nota, y asociar cada nota a un sentimiento, cosa realmente imposible si no dominas el piano de manera absoluta y puedes encontrar nuevas combinaciones (nuevos sentimientos) y no tienes un bagaje decente de sentimientos en tu ser.

Lograr ser pianista absoluto implica poder disfrutar al máximo de la música del piano y hacer disfrutar al máximo al resto de espectadores.

¿Siendo pianista absoluto hemos superado la Fase 5? No.

La Fase 5 se puede superar en cualquier momento, incluso cuando no eres pianista absoluto, pues eso es realmente difícil. Sin embargo, el deleite que otorga su superación es proporcional a la absolutez de tu pianismo, por lo que más te vale acercarte cuanto puedas al estatus de pianista absoluto antes de lograr tu fase 5.

Fase 5[editar]

La fase 5 consiste en:

  • Enamorarse de una música a más no poder.
  • Tocarla con la mejor orquesta posible
  • Tocarla de la mejor forma posible.

Es por ello que casi se requiere el pianismo absoluto, casi. Y no precisamente porque la orquesta deba ser la mejor posible, sino porque la interpretación deberá ser la mejor posible, y tal interpretación solamente se consigue cuando el pianista y el piano consiguen la unidad absoluta, se fusionan en espíritu, y el pianista domina el piano con absoluta independencia:

Se produce entonces el Ragnarok del Piano, la batalla final entre el público y el pianista, la realidad y la fantasía, el oido y el sonido, el pensamiento y el sentimiento. Y debe ganar el pianista absoluto, quien goza de un sonido tan fantástico como sentimental.

El resultado bien puede ocasionar que no vuelvas a tocar jamás el piano, pues nunca alcanzarás de nuevo tal magnitud. Se produce entonces la muerte del pianista y del piano, y el fin de su simbiosis. La muerte es el final de la vida, por eso no es relevante este hecho: Se trata de lo que ha ocurrido en vida, esas cinco fases en lo que se ha convertido, mirando hacia atrás cuando estuviste en la fase 1 y ahora que superaste la fase 5. Viviste, luego moriste, con una vida absoluta.